Replanteando la positividad corporal
En un momento en el que la positividad corporal se ha convertido tanto en un movimiento cultural como en una palabra de moda comercial, Legology pide volver a su verdadero significado inclusivo: la libertad de que cada uno lo defina por sí mismo.
Desde debates en redes sociales hasta artículos de opinión en columnas de belleza, la "positividad corporal" suele resumirse en un mensaje estrecho y simplista: "celebra tus defectos". Sin embargo, para muchas mujeres, esta interpretación no siempre tiene eco. Para algunas, la positividad corporal se trata de aceptación radical. Para otras, se trata de mejorar, autonomía y sacar lo mejor de sí mismas, especialmente de las partes en las que se sienten menos seguras. Legology cree que ambas son válidas.
La positividad corporal no se trata de un conjunto rígido de reglas. Se trata de cómo te sientes con tu cuerpo y qué decides hacer con él. Esto puede significar aceptar la textura natural de tu piel o usar una crema, un sérum o un tratamiento que te ayude a sentirte mejor. Ambos pueden ser empoderadores.
El doble rasero de la celulitis
Si bien la industria de la belleza adopta la innovación en productos antienvejecimiento —desde retinoles que reducen las arrugas hasta tintes capilares que disimulan las canas—, los productos anticelulíticos siguen siendo blanco fácil de críticas. Recientemente he leído varios artículos que desestiman los productos anticelulíticos por considerarlos superficiales o ineficaces; a menudo se los considera contradictorios con los valores de la salud corporal.
Pero aquí está la contradicción: si usar protector solar, aplicar ácido hialurónico o retinoides o usar corrector se considera cuidado personal (no vergüenza), ¿por qué las soluciones para la celulitis todavía se reciben con escepticismo o ridículo?
Según esa lógica, incluso usar protector solar o crema hidratante facial es contrario a la positividad corporal. Lo cierto es que la mayoría de las mujeres usan productos para proteger o mejorar su apariencia y sensación. Eso no significa que no amen su cuerpo, sino que lo cuidan.
La misión de Legology siempre ha sido replantear la celulitis, no como un defecto estético, sino como un reflejo de procesos internos más profundos, como la salud y el funcionamiento del sistema linfático. Nuestros productos Cellu-Lite y Air-Lite, los más vendidos, favorecen el flujo linfático y reducen la retención de líquidos, ayudando a aliviar la hinchazón y la congestión en las piernas. No se trata de buscar la perfección. Se trata de sentirse ligero, bien, definido y seguro de sí mismo.
Ofreciendo soluciones, no imponiendo estándares
En un mercado de belleza a menudo criticado por promover ideales poco realistas, Legology se distingue. No estamos aquí para convencer a las mujeres de que deben cambiar su apariencia. Legology existe para apoyar a quienes deciden hacerlo, bajo sus propios términos.
No les decimos a las mujeres que se arreglen la celulitis. Ofrecemos apoyo a quienes dicen: "Me molesta, me gustaría hacer algo al respecto". Ese es un mensaje muy diferente, basado en el respeto.
Un llamado a la verdadera autonomía del cuerpo
A medida que las conversaciones sobre belleza y bienestar continúan evolucionando, Legology insta tanto a la industria como a los medios de comunicación a alejarse de las narrativas simplistas y el pensamiento binario. La positividad corporal no debe usarse para avergonzar a las personas, inculcándoles o dejándoles de preocuparse por cómo se sienten en su propia piel. Debe ser una cuestión de autonomía, empatía y libertad de elección.
Porque la relación más positiva que puedes tener con tu cuerpo es la personal.
